capitulo 41

 

Axel esta en su despacho. No se puede concentrar. Tiene el periodico en la mesa y mira con mucho amor y con mucha tristeza la foto que han publicado de Raúl y él.

--Nuestra única foto juntos. Raúl no se ha preocupado de tener una foto nuestra por el recuerdo pero sí que salga en todos los periódicos perque se cree que soy rico, que soy un buen partido.

Se levanta nervioso.

--Axel Margarit es un invento, si él supiera que el hombre con el que se casó no existe, que la fortuna que tiene no es de nadie. Se cree que es rico porque la mitad de lo que es de Axel ahora le pertenece a él pero si Axel no existe ¿qué le pertenece a Raúl?

Axel se estremece pensando en lo feliz que se siente en brazos de Raúl:

--todo es tan hermoso y tan triste después.

Se lleva las manos a la cabeza:

--¡¡esto es una locura¡¡

Mira en su escritorio que hay un rotulo con su nombre: Axel Margarit.

--estoy mintiendo, estoy jugando con la fortuna de Emilio que ha sido un hermano para mi, ¿merecerá la pena todo esto?

Suspira enamorado mirando la foto de Raúl:

--he llegado muy lejos por este hombre y ahora no puedo dejar la lucha --se pone la mano en el pecho-- algo dentro de mi me dice que no es malo y que me puede querer. Yo sé que me va a llegar a querer mucho.

Piensa con amargura en lo que ocurrido:

--Yo sé que se fue por orgullo y estoy seguro que estos días en los que estemos separados le servirán para darse cuenta de que me ama y cuando regrese será otro. Yo estoy seguro que me está echando de menos tanto como yo a él.

Axel se aferra a esa esperanza para no sufrir tanto.

Mientras  Raúl no se cansa de recorrer el cuerpo de ese hombre que acaba de conocer:

--como me gusta tu cuerpo y lo mejor es que no sólo eres guapo sino que sabes usar tu cuerpo.

--Ya, dejame descansar.

Raúl lo mira ofendido:

--¿¿descansar? ¡Yo creía que eras un macho¡

El hombre la mira seductor:

--¡sí pero es que ya son tres seguidos¡

--¡¡los mismos que yo... yo nunca me canso de ti¡¡ ¡yo me acabo de venir, te he dado tiempo a recuperarte¡

--¡eres un vicioso. Nunca vi a nadie tan insaciable¡ --dice el hombre.

Raúl lo mira con cara de degenerado y se la empieza que chupar pero el otro se la quita de las.boca.

--¿Porque no hablamos un poco?, ni me has dicho tu nombre, yo me llamo...

Raúl lo hace callar con un beso:

--no me importa. Nos esperan unos días maravillosos los dos juntos y preparate porque no te pienso dejar salir de esta cama.

El guapo chico lo mira con cara de degenerado:

--¿es que pretendes matarme?

Raúl lo devora con sus besos:

--si, quiero apoderarme de tu belleza. ¿no te encanta coger hasta que te duele de placer?

--me apasionas tú.

--Pues no se hable más.-Raul.

Y los dos siguen cavalgando el uno sobre el otro.

David y Cosme están en el despacho. El abogado hace una llamada mientras que David está ansioso. Cuando cuelga Cosme lo mira serio.

--¡¡di ¿¿qué averiguaste?¡

--No te va a gustar.

--¿¿¡que pasó?¡

--No sólo se casaron sino que lo hicieron en bienes mancumunados.

David tiene el rostro desencajado por la rabia:

--¿¿¡que?¡¡¡no puede ser¡¡

--pues así es, tenemos un nuevo accionista en la empresa.

--¡¡pues me las van a pagar¡¡

David está como loco y Cosme trata de calmarlo:

--con la cabeza fría no se piensa bien.

--¡¡es que ya no hay nada que pensar ese don nadie me ha ganado la batalla¡¡

--Ya nos hemos hecho con una fuerte suma de la empresa, tenemos para vivir como reyes, podemos huir del pais y disfrutar de todo ese dinero que poco a poco hemos ido desviando a nuestras cuentas --cosme.

A David lo que más le duele es que Axel se haya acostado con él y después se haya casado con otro. El hombre rápidamente piensa en algo para destruir a Axel.

--tenemos que lograr que nuestros mejores clientes se ponga en contra de Axel y que para esta tarde mismo le exigan una reunión urgente.

--¿y como lo vamos a hacer? --Cosme

--pues alguien les tendrá que hacer ver el inepto Presidente que tienen...

Los dos sonrien victoriosos. Y David se queda solo mientras que Cosme sale del despacho para poner en practica el plan, David da golpes a la mesa con mucho odio:

--¡¡¿¿¡ese imbecil se  cree que yo soy uns puta ¡¡¡? ¡¡¿¿como se ha atrevido a hacerme esto?¡¡¡me las va a pagar¡¡

Axel se asusta con los problemas que le presentan los clientes. Pide ayuda a Emilio:

--¡¡quieren que les hable y yo no sé que decirles¡¡te van a pedir mi cabeza, yo creo que lo mejor es que dimita y David vuelva a ser el Presidente¡¡

Emilio apoya a su amigo:

--Yo sé que tú tienes los conocimientos.

Axel está muy asustado:

--¡¡pero es que yo no sé hablar en público ¡¡

--el que no sabe hablar en publico es Marcos. Axel puede hacer todo lo que desee.

Axel habla flojo:

--Axel es un invento.

--Marcos tienes que intentarlo, tienes que demostrar a todos lo que no confian en ti lo que vales.

--¿y sino lo logro?

--pues nos vamos al demonio.

--No quiero decepcionarte.

Emilio lo ama y pondría su vida en sus manos. Poner la empresa en sus manos no le preocupa.

--sólo me vas a decepcionar si eres un miedoso. Tú mereces ser el Presidente y no quiero que tengas miedo.

Axel trata de mostrarse seguro ante su amigo pero se muere del susto. No sabe qué hacer.

--¡¡el libro, el libro me tiene que ayudar. Yo mejor me voy a la hacienda¡¡

Axel iba a salir pero David entra en ese momento:

--todo el mundo está en la sala  de juntas, vamos.

David lo tiene agarrado del brazo y lo va sacando de su despacho y Axel no sabe qué hacer:

--¡¡no, no¡¡aún no puedo ir¡¡

--es que no les puedes hacer esperar, darás peor imagen de las que ya tienes.

Axel está muy nervioso:

--¿y no podemos dejar la reunión para otro dia?

--bueno si los prefieres contesto yo a sus preguntas...

Axel sabe que si hace eso será su perdición pero se siente incapaz de enfrentar la situación:

--ojala el libro estuviera aquí-murmura.

David lee su miedo y sabe que no podrá hacer frente a la situación:

--hoy vuelvo a ser el Presidente --dice David para sí.

La puerta ya está cerrada y por debajo se ve un resplandor. Axel sonrie:

--no puede ser.

--¿el que no puede ser? --David.

Axel se siente más seguro:

--¡en un minuto estoy listo¡¡

--pero...

--¡¡ahora vengo¡

Axel se encierra en su despacho, a David no le gusta la seguridad de él.

Sobre la mesa está el libro de la abuela de Emilio, abierto en una pagina:

--¡¡tú sí que eres mi Ángel de la guarda, sea quien sea el que esté detrás de esto bendito sea¡¡

Axel se apresura a leer el hechizo que está escrito:  "Que mis labios digan lo que tienen que decir, que se aten los miedos, que se libere la sabidura, que sea lo que merece ser". Axel se siente otro y entra la sala de juntas dispuesto a triunfar. Ni a David ni a Cosme le gusta la mirada de ganador del Presidente.