Axel arrastra a Luis hasta el interior de su departamento. Lo besa con mucha pasión. Aunque no le gusta el chico, Axel necesita sentirse deseado. Se deja llevar por sus impulsos. Luis está feliz entre sus brazos. Es algo rápido. Lo justo para el desahogo de Axel que no le importa si el otro disfruta o no. Luis está en shock. Está como en un sueño. Nunca habia vivido un momento de pasión como ese. Ha sido breve pero intenso. Ha vibrado sólo por estar entre los brazos de Axel. Jamás pensó estar con un hombre como Axel. No es sólo su belleza. Es algo que lo ha atrapado y que no lo puedo expresar en palabras. Axel se siente desahogado aunque algo incómodo porque no le gusta nada el chico y no le gustaría meterlo en su vida.
--gracias por no rechazarme, lo necesitaba--dice Axel saliendo de la cama y tomando los slips.
Luis no dice nada, no tiene fuerzas. Sólo sonríe feliz. Axel agarra sus pantalones. Va en slips lo que provoca aún más los suspiros de él. El guapisimo chico saca su billetera y muestra un par de billetes:
--si quieres que te pague algo... No sé... ¿cual seria tus honorarios? --dice con cierta timidez.
Luis lo mira con el rostro desencajado:
--¡¡no claro que no¡¡no me ofendas¡¡yo no soy un puto¡¡
--está bien... perdona... pero es que no sé, todo fue tan rápido y me llamaste y me fuiste a buscar, yo estaba seguro que lo hiciste por dinero... perdona. No creo que vivas de tus empanadas.
--¡¡guarda ese dinero, imbécil ¡¡ --dice muy ofendido.
Axel guarda su dinero y se empieza a poner los pantalones:
--¡¡perdona, perdona¡ pues gracias.
Luis lo mira triste.
--¡¡lo que hice fue porque me gustaste desde la primera vez pero no pensé que fueras un imbécil ¡
--está bien, perdona.
Luis lo echa de malos modos y sin salir de la cama.
--¡¡vete, no te quiero volver a ver¡¡
Axel se siente culpable:
--perdoname. Tú me has hecho sentir muy bien y yo sólo te queria ayudar, perdona.
Luis le da la espalda:
--¡¡vete, que te vayas¡¡¡¡vete¡¡
Con los pantalones desabrochados y la camisa y los zapatos en las manos Axel dice:
--tranquilo, no te volveré a molestar.
Cuando oye que se cierra la puerta Luis llora
--¡porque lo hice?¿porque dejé que se burlará de mi?
Luis acaricia las sábanas:
--su olor, su aroma. Aunque haya creido que soy un ofrecido no me importa. Ha sido mi mejor vez, jamás podré permitir que me toque otro hombre¡jamás¡¡ ¡¡ha sido un sueño, ojala no hubiera despertado¡¡
Luis se levanta y camina desnudo pensando en Axel.
--¿y ese libro?
Axel se ha dejado el libro de los hechizos a los pies de la puerta. Luis lo recoge y lo deja sobre la mesa
Axel se acaba de vestir en el rellano:
--¡¡¿¿como se te ocurre acostarte con ese hombre?¡¡ ¡¡mira en que te ves ahora¡¡
El joven sonrie seductor:
--pero es rico eso de moverse y que a cada rato haya un hombre dispuesto a regalársete, almenos sexo no me faltará que como Marcos gratis no lo cataba.
Aunque al final se ha sentido un poco incómodo, Axel necesita ese pasatiempo. Nada más salir Axel se da cuenta que no tiene el libro.
--¡mierda ¡me lo dejé en casa de ese hombre¡¡
Aunque no tiene ganas de verlo otra vez regresa sofocado por su libro.
Luis está muy curioso con ese libro. Se acerca. Llaman al timbre.
--debe ser Axel.
Por un lado está feliz de volver a verlo pero por otro lado le duele la despedida. Se va hacia la puerta y no ve como el libro desaparece. Luis y Axel cara a cara se miran incómodos. Luis en calzoncillos.
--hola... lo siento... yo...
--vienes a por tu libro. Pasa, lo deje en la mesa.
Axel entra muy agresivo:
--¿¿¡lo has leido? --dice zarandeándolo.
--¡claro que no¡¡estaba en el piso, solo lo recogi¡¡
Axel se aparta y busca su libro.
--¿¿donde está?
--en la mesa, ya te dije.
--¡¡que no está¡¡
Luis se sorprende mucho.
--¡¡no puede ser¡
Axel está desesperado:
--¡¡ese libro es muy importante, no me hagas esto¡¡sé que me porté mal contigo pero mi libro no¡¡dámelo¡¡
--¡te juro que lo dejé ahí¡¡
Axel la zarandea, Luis, sin entender lo que pasa, sigue con lo mismo. Asegura que dejó el libro en la mesa. Axel enloquecido pone patas arriba toda la casa. Luis no hace mas que pedirle que se vaya. Axel está desesperado:
--¿¡dónde está mi libro?¡
--¡¡¿ya ves que tu libro no esta aqui?
--¿¿que le has hecho?
Luis ya esta harto:
--¡¡vete, si ese libro era tan importante haberlo cuidado¡¡
Muy triste Axel suplica:
--por favor. Ese libro es vital para mi. Por favor mañana espero que me lo devuelvas.
Axel se va dejando a Luis perplejo por lo que ha pasado. Axel se mete en su auto y golpea el volante:
--¿y ahora como le digo a Emilio que perdí su libro?
Emilio ha regresado a su casa.
--¿¿que es lo que le habrá pasado a Marcos?
Al ver que salió por otra puerta, Raúl busca a Emilio a su casa y trata de seducirlo. Están a solas en la casa. Raúl es muy provocativo. Lo quiere besar y Emilio huye, le pide que se vaya. Axel entra en ese momento. Desde el pasillo oye a Raúl. Al lado de una planta hay un spray que usan para mojar las hojas. Así que se pulveriza la cara. Se acerca ya convertido en Marcos.
--Yo sé que te gustó mi beso, seguro que era tu primera vez.
Sin darse cuenta que su amigo está en la puerta de la sala y para sacarse de encima a la hombre, Emilio le confiesa:
--¡¡sentí asco, jamás un hombre me habia besado y no quiero que lo vuelva a hacer¡¡¡no quiero que nadie me bese y menos usted¡
Esto toma muy de sorpresa tanto a Raúl como a Marcos.
--¿¿que te pasa??¡no me digas que no te gustan los hombres pues eres una loca¡¡ --dice Raúl con desprecio.
Muy seguro Emilio dice:
--Estoy enamorado de mi primo. Es un amor imposible pues nos criamos juntos y él me ve como.un hermano pero yo lo amo y lo amaré toda la vida.
Marcos no da crédito a lo que oye. Raúl lo mira con desprecio:
--¡¡degenerado¡
--así que no pierda su tiempo conmigo.
--¡¡que asco¡¡
Raúl insiste. Se muestra coqueto.
--con tu primo no puedes tener nada si te ve como un hermano y yo te lo puedo dar todo. Con esa cara seguro eres virgen. Yo te voy a dar lo que ningún otro hombre te ha dado.
--es que lo amo a mi primo pero yo no quiero tener sexo con otro. Juré por mis padres que sólo sería de ese hombre que amo y como él no me quiere no voy a ser de nadie. Voy a ser cura. Todo mi dinero será para Axel así que a mi no me busque más.
Raúl sale enfadado y se encuentra con Marcos:
--¡¡quita esperpento¡¡
Raúl le da un empujón y hasta lo tira al piso. A Marcos le duele el desprecio con el que el hombre que le gusta lo trata pero está más impactado por lo que ha oido. Raúl se va hecho una furia. Emilio se da cuenta que su amigo está ahi.
--¿Marcos?¿tú?
Marcos se levanta aturdido:
--¿¿que dijiste?¿que amas a tu primo?¿,a mi?
Marcos está perplejo. Emilio está muy asustado temiendo que ese sea el final de su amistad con su amado.
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